750ml de nata para montar
200g de azúcar
Zumo de 2 limones
2 hojas de gelatina
200g de fresas
MODO DE PREPARACIÓN:
Comenzamos preparando una crema de limón. Para ello ponemos en un cazo el zumo de los dos limones, los dos huevos enteros y 100g de azúcar. Calentamos a fuego lento sin dejar de mover con barillas hasta conseguir que espese. Pasamos la mezcla por un colador para evitar cualquier posible grumo. Reservamos.
Ponemos a hidratar las hojas de gelatina.
Mientras tanto, en otro cazo ponemos la nata y el azúcar a calentar hasta que se disuelva, añadimos las hojas de gelatina hidratadas y escurridas y la crema de limón. Removemos hasta que la gelatina se disuelva. Dejamos templar.
Trituramos las fresas hasta hacerlas puré y las ponemos en el fondo del vaso. Con un cazo vertemos poco a poco la crema de limón, de esta forma queda como "marmolado".
Dejamos enfriar durante mínimo dos horas tras las cuales queda una consistencia cremosa. Si lo dejamos toda la noche conseguimos que quede más consistente.
MODO DE PREPARACIÓN:
Comenzamos preparando una crema de limón. Para ello ponemos en un cazo el zumo de los dos limones, los dos huevos enteros y 100g de azúcar. Calentamos a fuego lento sin dejar de mover con barillas hasta conseguir que espese. Pasamos la mezcla por un colador para evitar cualquier posible grumo. Reservamos.
Ponemos a hidratar las hojas de gelatina.
Mientras tanto, en otro cazo ponemos la nata y el azúcar a calentar hasta que se disuelva, añadimos las hojas de gelatina hidratadas y escurridas y la crema de limón. Removemos hasta que la gelatina se disuelva. Dejamos templar.
Trituramos las fresas hasta hacerlas puré y las ponemos en el fondo del vaso. Con un cazo vertemos poco a poco la crema de limón, de esta forma queda como "marmolado".
Dejamos enfriar durante mínimo dos horas tras las cuales queda una consistencia cremosa. Si lo dejamos toda la noche conseguimos que quede más consistente.
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